“El Camino de la Esperanza. Rembrandt y Burnand en Roma”, del 8 de abril al 2 de junio de 2025 en San Marcello al Corso
Desde el martes 8 de abril hasta el lunes 2 de junio de 2025, en la Iglesia de San Marcello al Corso de Roma tendrá lugar la muestra «El Camino de la Esperanza. Rembrandt y Burnand en Roma». El evento, que forma parte de la iniciativa «El Jubileo es Cultura», se enmarca en el contexto del Jubileo Ordinario de 2025, promovido por el Dicasterio para la Evangelización.
En la muestra, cuyo curador es el Padre Alessio Geretti, se expondrán dos obras de excepcional importancia: Los discípulos Pedro y Juan corren juntos hacia la tumba de Cristo la mañana de la Resurrección de Eugène Burnand (1898) y La Cena en Emaús de Rembrandt Harmenszoon Van Rijn (1629). Se trata de dos de las pinturas más famosas del mundo dedicadas al día de Pascua, el día de la Resurrección de Jesucristo de entre los muertos.
Las obras maestras
Los discípulos Pedro y Juan corren juntos hacia la tumba de Cristo la mañana de la Resurrección de Eugène Burnand (1898)
En 1898, Eugène Burnand presentó su famoso cuadro “Los discípulos Pedro y Juan corren juntos hacia la tumba de Cristo la mañana de la Resurrección” en el Salón de París, donde obtuvo un éxito inmediato. El Estado lo adquirió inicialmente para el Musée du Luxembourg. Desde entonces ha permanecido en las colecciones públicas francesas - también se expuso en el Louvre - hasta llegar a la actual sede del Musée d’Orsay. Burnand, nacido en la Suiza francófona en el seno de una familia protestante, dedicó su carrera a combinar arte y fe, a pesar de la tradición reformada que limitaba el uso de imágenes religiosas. En una carta de 1897, el artista describió su credo artístico: “Para mí, el misticismo consiste más en la intensidad y profundidad de la visión que en la imaginación abandonada a sí misma. Soy realista por naturaleza y por destino”. La obra capta el momento en que los discípulos, todavía incrédulos, corren hacia el sepulcro. La luz del sol naciente y el movimiento de las figuras expresan una intensa esperanza, simbolizada por el resplandor dorado del cielo. Con las manos marcadas por el trabajo y el rostro tenso, los discípulos no saben aún que verán a Jesús resucitado, marcando el amanecer de una nueva esperanza, la más radiante de la historia.
La Cena en Emaús de Rembrandt Harmenszoon Van Rijn (1629)
En el cuadro “La Cena en Emaús”, Rembrandt representa el momento en que dos discípulos, llenos de asombro, reconocen a Cristo resucitado. La obra, inspirada en el pasaje de Lucas 24, transmite un fuerte mensaje religioso, transformando una escena de posada en una revelación. El efecto de contraluz, con la fuente de luminosidad que proviene de detrás del cuerpo de Cristo, resalta su perfil, sugiriendo el instante en el que pasa de la “visibilidad física a la invisibilidad”. Los discípulos reaccionan con emoción: uno retrocede atemorizado, mientras que el otro se arrodilla ante Jesús, haciendo caer el taburete. En el cuadro aparece también una mujer, figura típica de la iconografía, que trabaja en la posada. Rembrandt la sitúa en un rincón iluminado, sugiriendo que quien se dedica a servir al prójimo ya está dentro de la luz del Resucitado, incluso sin darse cuenta. La obra se distingue por un potente uso de la luz y la profundidad espiritual que transmite.
Los dos cuadros expuestos en Roma ofrecerán una profunda reflexión sobre la fe, la esperanza y el poder del arte para transmitir los mensajes espirituales más elevados.
La inauguración del 8 de abril, prevista para las 18:00, será de entrada libre y gratuita hasta agotar plazas. A partir del 9 de abril, la muestra podrá visitarse gratuitamente todos los días de las 8:00 a las 20:00 en la iglesia de San Marcello al Corso, en piazza San Marcello 5.